martes, 10 de julio de 2007

La Kyra

Quiero hablar sobre un animal muy especial en mi vida, se llama Kyra (Kyris como le digo de cariño) es una perrita Schnawzer de 4 años, es mi compañera y desde que la tengo a mi lado mi vida ha sido más feliz. En mi casa no son muy sensibles y cuidadosos con los animales, a excepción mía.
Cuando Kyris tenía casi un año se enfermo de moquillo, se puso muy mal, estaba en los huesos, se le calló el pelo, no podía alimentarse sola ni mantenerse en pie, ni siquiera para hacer sus necesidades. A mi familia le daba asco atenderla o limpiarla, pero yo que soy como su madre siempre estuve ahí para ayudarla. Incluso dormía conmigo, aún sucia; lo hacía para que no se sintiera rechazada ni sola. Fueron noches dificiles y de desvelo. Kyra es un animal muy fuerte, porque a pesar de su estado logró salir adelante y se curó.

Hace unos meses, volvió a enfermarse, estuvo hospitalizada y me dijeron que su hígado no esta bien, a causa de esto su salud se deteriora cada vez más, bajo mucho de peso, tiene un color amarillento en su cuerpo y a veces su ánimo esta decaído.

Hace un rato me asusté mucho porque comenzó a tambalearse hasta que se calló, después empezó a retorcerse y tenía la mirada perdida, su corazón latía rápido. Pensé que estaba muriendo.
La llevamos lo más rápido al hospital, en el trayecto, Kyra ya empezó a levantar la cabeza y le ladro a una persona que pasó junto al auto, eso me ánimo un poco.
En el hospital me dijeron que su estado es crítico, que tal vez con medicamento puedan estabilizarla y lograr que viva, o hasta que averigüen bien el porque de su enfermedad, tal vez pueda sanar (pero existe poca probabilidad). De nuevo se quedo en el hospital.

Mi Kyris es muy valiente, fuerte, es re aguantadora a pesar de su tamaño. Espero que se recuperé, pero no quiero que sufra con su enfermedad. Ojalá pudiera decirme que le duele, y que yo pudiera hacer algo para que se sienta mejor.
Cuando Kyra esta bien es muy alegre, es muy brava, le ladra a todo mundo y siempre le tira la mordida a quien no conoce y por lo regular a quien me cae mal (eso me hace reír), es muy enojona, como su madre (yo).

Kyra es como una hija, es mi adoración. Es muy cariñosa, cuando llego a casa o estoy deprimida siempre va y me abraza (aunque lo duden, no se como aprendió).

1 comentario:

entrenomadas dijo...

Karlita, te comprendo a la perfección. Yo tengo gatos y perros. Se llevan muy bien. Pero cuando uno de mis gatos se pusó enfermo para mí fue terrible.
De todas formas, LA KYRA ha tenido mucha suerte teniendote cerca, y eso es en lo que debes pensar. Ojalá todos los perros tuvieran esa oportunida de tener a alguien que los quiera y respete.

Qué se recupere. Un beso a las dos.