Al partir te llevaste la mitad de mi corazón.
Ahora vivo medio muerta.
Imposible describir lo que fuiste para mi,
pero eras mi alegría,
eras mis risas
y algunas veces mis enojos;
muchas veces mi tristeza
y mi preocupación.
Eras media vida mía
y ahora vivo medio muerta.
Te busco en casa
y en esa cama ahora fría,
te busco en un sueño que nunca llega.
Me haces falta,
hace falta tu dulzura.
Te llevaste medio corazón
y media vida.
Ahora vivo a medias...
Así seguiré hasta que muera
y por fin nos encontremos
para siempre.
martes, 14 de agosto de 2007
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1 comentario:
Seguro que los sentimientos vuelan y se vuelven más bellos, con menos ataduras.
Hermoso texto.
Besitos
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